Fue declarado por la Organización Internacional del Trabajo (OIT), en el año 2002, con la finalidad de concentrar la atención en este problema mundial y su forma de erradicarlo.
El fuerte incremento de la pobreza a nivel global, por causa de la pandemia de COVID19, puede dar lugar a que las familias dependan en mayor grado del trabajo de sus hijos. A fin de reducir estos riesgos, el Estado Nacional y el Provincial han reforzado las medidas de apoyo a los ingresos para las familias en situación de vulnerabilidad, a través de prestaciones por hijos a cargo, el IFE, la Tarjeta Alimentar y otras prestaciones. También son fundamentales las campañas de regreso a la escuela y la intensificación del aprendizaje, con el objetivo de que los niños no abandonen las aulas.
En Santiago del Estero le decimos «no al trabajo infantil» y reafirmamos nuestro compromiso de cuidar y proteger la integridad de nuestros niños a fin de asegurarles un futuro promisorio en nuestra provincia.